Montag, 27. April 2009

Teruel existe




La gran desconocida, esa es la provincia de Teruel que recurrió al famoso "Teruel existe" para luchar contra el olvido por parte de la administración. Y es que las distancias etre los pueblos turolenses no se miden en quilómetros sino en tiempo, ya que su estrechez y curvas hacen que 30 km no sea lo mismo aquí que en Zaragoza o en Burgos. Eso sí, quizá si tuviesen los turolenses mejores infraestructuras, sitios como la comarca del Maestrazgo perderían gran parte de su encanto (en la foto, Villarluengo).

Este fin de semana hemos ido a visitar a unos amigos que viven y trabajan en la escuela de primaria de Iglesuelas del Cid (el último pueblo de Teruel en la frontera con Castellón). Sus alumnos no suman más que la docena, repartiendo su tarea de educadores con otro pueblo vecino, el más grande de la comarca y que se llama Cantavieja.

Rodeados de naturaleza pura, a una altura de 1400 metros aproximadamente, comimos, paseamos y sobre todo nos relajamos y disfrutamos de las maravillas de la naturaleza.

El domingo nos adentramos más en la sierra y descubrimos parajes tan extraordinarios como los órganos de Montoro (en la foto) o el pueblo de Pitarque, nombre que debe a su río y que al final no nos atrevimos hacer la excursión para ver su nacimiento, ya que suponía hora y media el trayecto y el cielo oscuro no paraba de amenazar la lluvia que al final no llegó.

Si no conocéis esta zona, de verdad que os la recomiendo, además de que podéis comer mucho por muy poco. Por ejemplo, un menú de croquetas, patatas bravas y ensalada de primero, una fuente de ternasco y conejo con patatas de segundo, postres, cafés, vino y cereveza, sólo por el módico precio de 11€ persona. Quizás en estos tiempos de crisis no sea una mala opción para dar una escapadita, ¿no creéis?

Freitag, 24. April 2009

Aterrizaje

¡Hola!
Por fin me he decidido a inaugurar un nuevo blog, una nueva etapa en la que espero poder contaros cosas interesantes y buenas. De momento, sólo deciros que he recuperado a Zaragoza como lugar de residencia y que entre buscar trabajo, apuntarme a cursos varios y ser voluntaria en una ONG como profesora de español van pasando mis días.
La pasada Semana Santa la pasamos en Galicia, en mi pueblo favorito, que no es otro que el mío (A Guarda por si hay algún despistado) y donde rescaté esta foto de una gaviota en el Miño. Está tranquila, contemplando el paisaje, muy a gusto, como si quisiera quedarse allí para siempre y es que el espectáculo natural no es para menos. Pues bien, espero que este nuevo blog también os atraiga lo suficiente como para hacer una paradita regularmente. Claro está que para eso tengo que escribir mucho, mmmmnnnnnn, bueno, lo intentaré.

Besos a todos todos y todas todas.